Hay un fenómeno en la actualidad que está extendiéndose sorprendentemente en el mundo entero, es el denominado “Coworking”. Se trata de espacios compartidos donde teletrabajadores, autónomos, freelancers, emprendedores, microempresas y cualquier persona con una idea y ganas de desarrollarla, se reúnen y desarrollan sus proyectos. España es el tercer país del mundo en espacios coworking y con una difusión especialmente veloz de esta cultura colaborativa tan positiva.
En un inicio la situación del empleo por cuenta propia y ajena en España, junto a la búsqueda creciente de una vida con más sentido y coherente con quienes somos, es lo que ha llevado a tantas personas a buscar soluciones creativas …
Porcentaje altísimo de personas inactivas, escasas ofertas de empleo, descenso de los salarios, puestos poco flexibles y muchas veces poco atractivos, descenso de ayudas sociales, necesidad de buscarse la vida unos, inquietud por encontrar otra forma de vida otros, desequilibrio entre la vida personal y profesional, insatisfacción personal por no poder desarrollar todo su potencial dentro de las estructuras actuales …
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Crecimiento cada vez mayor del numero de autónomos, emprendedores y freelancers, aislamiento y falta de comunicación que sienten muchos de ellos trabajando sin equipo, falta de línea divisoria entre vida personal y profesional, …
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Alienación personal = coherencia entre lo que pienso /siento/ hago
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Crecimiento extraordinario de espacios compartidos de trabajo
Lo que no sabían muchos de estos “Bohemios digitales” (Serendipity machine), “Knowmads”(Knowmad society) o profesionales independientes es que iban a encontrar Comunidades donde desarrollar todo su potencial social y profesional. Esta quizás sea la razón última de la explosión de dicho movimiento.
Estos profesionales independientes se están convirtiendo, cada día más, en profesionales interdependientes, agentes del cambio y cocreadores indispensables de un nuevo sistema económico basado en valores sociales, donde la rentabilidad es requisito indispensable para la sostenibilidad de sus proyectos, pero no el objetivo último.
Como destacan en el libro Serendipity machine una de las grandes diferencias con relación a las empresas tradicionales es que mientras en éstas, los intercambios con el exterior se basan principal y casi exclusivamente en transacciones comerciales, en los espacios coworking los intercambios van mucho más allá, compartiendo todo lo que uno es y sabe, además de lo que vende.
Son múltiples los beneficios de estos espacios para sus miembros: buen ambiente, reducción de costes, aprendizaje continuo, ambiente motivador, incremento de oportunidades de negocio, mayor armonía vida personal-profesional, etc. Sin embargo, en función de la capacidad de gestionar la apertura e interconectividad del espacio y favorecer la de sus miembros, estos beneficios pueden extenderse hasta el infinito y más allá, desarrollando así su potencial, la sinergia y la serendipia entre todos los implicados . El resultado puede ser, como ya está ocurriendo en algunos de estos lugares, un acelerador casi mágico del potencial y talento de las personas.
Si estamos de acuerdo en que el potencial de las organizaciones está constituido básicamente por el potencial de sus empleados y su talento por el sumatorio del talento aplicado de los mismos y la sinergia creada, quizás, sólo quizás, sería positivo que las organizaciones empezasen a estar atentas a este movimiento imparable de espacios de colaboración productiva, humana y eficaz que está dinamizando todo lo que toca.
Eres autónomo, freelance, tienes una idea que desarrollar, .. ¿a qué esperas para conocer el mundo del coworking?
Eres empresario o directivo.. y crees que las personas son el principal activo de tu organización. ¿Quieres favorecer la serendipia en tu organización convirtiéndola en un espacio más abierto e interconectado?
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